Más miedo que la muerte
«Hoy es un buen día para morir»
11/08/1959
08/11/2018
59 años
Albert Camus escribió en El mito de Sísifo que el único problema filosófico serio es el suicidio. Es fácil estar de acuerdo con esta afirmación, por eso resulta chocante que el suicidio sea un tema del que no se habla. Se evita porque es aterrador, como si al no mencionarlo dejase de existir. Un reflejo normal, pero cuyo efecto es el contrario: evitar nombrarlo lo hace más presente, como el elefante en la habitación, y produce todavía más miedo. O, en palabras de JK Rowling, «El miedo a un nombre aumenta el miedo a la cosa que se nombra» (Dumbledore, en Harry Potter y la piedra filosofal).
En España se suicidan unas tres mil seiscientas personas cada año. Eso son cerca de diez al día. Una cada dos horas y media. Para hacerse una idea de la magnitud del problema, baste recordar que la cifra de muertes anuales en accidente de tráfico ronda actualmente en torno a un tercio de esa cifra. Según la OMS, ochocientas mil personas se suicidan anualmente en todo el mundo. Las cifras pueden presentarse de una gran cantidad de formas impactantes. Por ejemplo: cada cuarenta segundos hay un suicidio y por cada uno de ellos hay otros veinte intentos. En 1998 el 2% de las muertes en todo el mundo fueron suicidios, por delante de las guerras y los homicidios.
Podríamos seguir dando cifras dramáticas. Sin embargo, lo verdaderamente terrible es que buena parte de estas muertes son evitables. Corresponden a personas con depresiones sin diagnosticar o sin tratar de forma adecuada…
Comentarios recientes